La responsabilidad social en la publicidad
Por Benjamín Garibay
La publicidad es el vehículo más usado por las empresas para dar a conocer sus productos y promociones. Los presupuestos que se le asignan llegan a ser cantidades tan sustanciosas que la espera de los resultados se convierte en algo crucial, a tal grado que el fin justifica el medio, y se llegan a tomar decisiones creativas y de estrategia que dejan mucho que desear. Anteponen los deseos personales y la avaricia al bienestar social y al equilibrio entre los intereses de la compañía y de la sociedad.
Debido al poder que tiene la publicidad en las conductas sociales y el impacto que tiene en los espectadores, es de suma importancia que los responsables de la creación de ésta tomen en cuenta a todos los involucrados y lo que significa para estos, cada uno de los elementos que se utilizan en la campaña.
Al momento de la creación de un acontecimiento de la magnitud que es una campaña, se debe entender que lo que se plasme tendrá un efecto en la sociedad, y eso te debe de hacer pensando en el bienestar de muchos y no de uno.
Una campaña de comida para perros toca temas como el sexo, la discriminación, obesidad y la popularidad. Se hacen analogías en la que si no tienes relaciones sexuales no eres popular, y una causa de esto es padecer de sobre peso. Por lo mismo se hace énfasis en que no es socialmente aceptado el ser gordo y que por eso son más infelices que los demás.
Las imágenes son explícitas y muestran directamente el mensaje que es discriminatorio y segrega gráficamente a las dos situaciones, dirigiendo luces y lineas hacia el foco de atención que son los perros que están juntos.
El copy es fuerte y directo, las frases resaltadas muestran la intensión de querer mostrar la consecuencia de ser gordo, es decir, que la vida es difícil, y la gráfica complementa esto al presentar una de las consecuencias, que es no encontrar una pareja con quien tener relaciones y perderlo a otro que no sea obeso.
La campaña olvida la responsabilidad social para asegurar la atención del público al tocar un rema controversial, que es ofensivo para algunos y para otros, el morbo lo convierte en fuente de alimento para su ciclo.
La campaña tiene gráfica fuerte, utiliza inteligentemente los colores para crear sensaciones y enfatizar el mensaje. El estilo de ilustración es uno de los elementos que llaman la atención, sin necesidad de utilizar temas socialmente irresponsables que puedan dañar la moral del público.
Siendo que se observa violencia y es presentada de una manera brusca y fatalista, el tema con el que se utiliza es igual de fuerte. Es un tema que debe de tratarse de frente, directamente y sin rodeos, debido a que por nuestras conductas, si no se hace de esta manera el público no tiene la reacción necesaria y no toma conciencia de la situación real en la cual participan.
Muestran las consecuencias de un hecho simple, y hace una analogía de lo dañino que es una acción diaria y aparentemente inofensiva con lo que es la caza ilegal de animales. Ambos tienen el mismo resultado.
La campaña carga con un mensaje importante y sensible que debe ser presentado para evitar mayor daño al medio ambiente y al planeta, por lo que se puede decir que tiene un alto nivel de responsabilidad social.
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